Caracas, 28 de junio de 2018. Tres meses sin cobrar tienen los trabajadores de la empresa Alunasa en Costa Rica. La compañía es parte del conglomerado del aluminio del Estado venezolano y sufre el cierre de las cuentas corporativas en los principales bancos costarricenses.
La medida ha afectado a los empleados, que habían sido despedidos y fueron reenganchados (el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social declaró sin lugar el recurso de suspensión de contratos) pero siguen padeciendo. La planta sigue parada.
“Hay trabajadores con meses de atraso en el pago del alquiler de la casa donde viven y bajo amenaza de ser desalojados; también con amenaza de ser privados de libertad por no poder pagar la pensión alimentaria; trabajadores que no pueden ya llevar alimentos todos los días a sus hogares”, expresó un trabajador que pidió mantener su nombre en reserva.
Con las cuentas bancarias cerradas, los recursos que estaban por ingresar no podrán ser cobrados y no se podrán hacer efectivos los pagos de nómina.
“Ni siquiera tenemos ahora un estimado de cuándo nos podrían pagar algo de los salarios atrasados. Todo esto hace que la desesperación se apodere de las familias costarricenses que dependemos de Alunasa”, dijo. “La planta sigue parada, no estamos yendo a trabajar y cada día que pasa es más angustiante y no vemos cómo esto puede resolverse”.
El personal directivo de Alunasa ha informado a los trabajadores que sus movimientos financieros están “sanos”. No obstante, los empleados creen que la única forma de revertir el cierre de las cuentas es que la estatal venezolana salga limpia en una eventual investigación judicial.
El presidente de Alunasa, Noel Martínez, envió una misiva al presidente de esa nación, Carlos Alvarado, en la que manifiesta la disposición de la empresa de permitir auditorías e investigaciones en un intento de revertir el cierre de cuentas, que –sostiene- ponen en riesgo de cierre a la transformadora de aluminio.
Alunasa abarca 95% de las exportaciones en la provincia de Puntarenas, lo que representa la generación de $ 41 millones anuales. Según Martínez en “condiciones normales”, la empresa emplea a más de 400 personas. Por esta situación la nómina se ha reducido a 277 trabajadores.
Lea en Punto de Corte: (Caso Alunasa) Banca costarricense cierra cuentas de la estatal venezolana por presunto lavado de dinero
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